Si esta pensando someterse a un injerto capilar con canas no hay ningún problema, las canas son folículos despigmentados pero plenamente útiles en los injertos capilares, aptos para extraer e injertar. las dificultades son para el cuerpo médico que llevará a cabo el injerto capilar con canas, pues existe mayor dificultad visual para localizar los folículos capilares debido a la despigmentación, algo que se puede solventar con el uso de microscopio estereoscópico.
La pérdida de color en el pelo se debe a la falta de producción de una proteína llamada «Wnt», dando lugar a cabellos más gruesos, menos flexibles y manejables que el pelo con pigmento. Si el paciente posee una zona donante con alta cantidad de cabellos canosos el injerto capilar será así en la zona receptora, sin inconvenientes.
Las canas no son impedimento para el injerto capilar, sólo es preciso decir que el pelo oscuro siempre dará una imagen de mayor cobertura que el pelo blanco, aproximadamente en un 10%, por tanto: es indispensable que el equipo médico lleve a cabo un diagnóstico previo al injerto capilar con canas y así elegir cuál es en cada caso la solución más óptima.
En cualquier injerto capilar siempre debe valorarse el estado de alopecia y la viabilidad para obtener las necesarias unidades foliculares de la zona donante, y si los requerimientos de cantidades se cumplen el injerto capilar con canas tendrá el mismo éxito que si se tratara de cabello con pigmentación normal.
La vida y los ciclos de un cabello canosos es igual al de un cabello que no ha perdido pigmentación, donde el crecimiento del pelo donante seguirá su proceso biológico de forma natural en todo momento. Lo único que debe tener el médico además de experiencia, es una mayor precisión tanto en la extracción de unidades foliculares como en el injerto en las áreas a cubrir con nuevo pelo.